Nuestro día a día ya sería imposible sin la electrónica, una tecnología irrenunciable si queremos un suministro de energía fiable. Las sobretensiones son un riesgo, y no solo para los equipos: pueden provocar la caída de toda la instalación eléctrica. El daño económico puede ser considerable por las pérdidas operativas, de datos y de productos.

El creciente uso de equipos electrónicos añade un riesgo más, ya que las redes de alimentación cada vez se complican más. Al mismo tiempo, el formato de estos equipos es cada vez más reducido, lo que los hace más sensibles a las fluctuaciones de la red eléctrica.
Para proteger las instalaciones de estos trastornos están los dispositivos de protección contra sobretensiones, aunque obligan por regla general a incorporar un fusible previo externo. La consecuencia: armarios eléctricos a rebosar. Otro requisito difícil de cumplir al utilizar un fusible previo externo es la longitud máxima de 0,5 metros en el cableado.
La tecnología ACI es un nuevo desarrollo de DEHN que ofrece una solución innovadora a todos estos retos: nuestros módulos de protección con ACI (Advanced Circuit Interruption) integran ya una combinación de interruptor y vía de chispas en el descargador y eliminan el fusible previo externo. Los beneficios son patentes: más espacio en su armario eléctrico, más libertad en el montaje y protección fiable de las instalaciones.