Con la llegada del invierno, el consumo energético en los hogares en España aumenta considerablemente. Las bajas temperaturas hacen que pasemos más tiempo en casa y utilicemos la calefacción y otros dispositivos para mantener el calor, lo que incrementa el gasto energético. Según datos de Red Eléctrica de España, el consumo eléctrico medio mensual de los hogares españoles es de 270 kWh, pero, en los meses de invierno aumenta, con diciembre y enero a la cabeza, con cerca de 350 kWh.
Con el objetivo de evitar que lleguen sorpresas a final de mes con las facturas de la luz y promover un consumo responsable en los hogares, Eaton, compañía líder en gestión de la energía, propone seis consejos para ahorrar energía en las temporadas donde las temperaturas son más bajas:
- Utiliza aparatos de medición inteligentes: dispositivos como los termostatos inteligentes permiten programar y ajustar la temperatura del hogar desde cualquier lugar. Para hacer un uso más eficiente de estos aparatos, Eaton aconseja ajustar la temperatura del termostato de manera constante entre 18ºC y 20ºC. Además, es recomendable programar el termostato en las horas en las que se está presente en casa, y, por las noches, bajar la temperatura unos grados para que la factura no suba en exceso.
- Apuesta por sistemas de calefacción más eficientes: todavía hay muchos hogares que cuentan con sistemas de calefacción antiguos, siendo una opción eficaz cambiarlos por sistemas más modernos. A pesar de que los sistemas actuales -como los suelos radiantes, geotermia o aerotermia, o las bombas de calor- requieren de una mayor inversión inicial, a largo plazo son la elección adecuada si el objetivo es reducir los costes elevados en invierno. Estos sistemas son respetuosos con el medioambiente ya que en la mayoría de las ocasiones son impulsados por energías renovables.
- Evita el consumo fantasma: Hay muchos electrodomésticos -como los calefactores- que, aunque estén apagados siguen enchufados a la corriente y siguen utilizando energía de forma continua. Desde Eaton, aconsejan vigilar estos aparatos y desenchufarlos cuando no se vayan a usar. Una buena opción es contar con regletas con interruptor, ya que permiten controlar mejor el flujo de energía de los enchufes.
- Mejora el aislamiento: esta es una de las principales razones por las que se malgasta más energía durante los meses fríos. La calefacción durante el invierno gasta mucha energía debido a la cantidad de horas que está activa, por lo que aislar correctamente las puertas y ventanas hará que se reduzca considerablemente la pérdida de calor y, por lo tanto, el consumo eléctrico asociado. En Eaton, recomiendan el uso de cortinas térmicas, ya que ayudan a retener el calor en el interior de los hogares durante la noche.
- Elije iluminación de bajo consumo: según la OCU, las bombillas led sólo gastan entre 3 y 12 W, una cifra muy por debajo de las fluorescentes que requieren entre 8 y 17 W, y las halógenas, que necesitan entre 25 y 60 W. Es por ello por lo que desde la compañía animan a que, de cara a los meses de invierno con menos horas de luz natural, se intenten sustituir las bombillas antiguas por las LED, haciendo así que el gasto energético se reduzca considerablemente y sea más eficiente, además de sostenible.
- Aprovecha las horas valle: estas se refieren a un único periodo de 8 horas que abarca de 00:00h a 08:00h entre semana, las 24 horas de los fines de semana y los días festivos nacionales. Durante estas horas el precio de la energía es más bajo, por lo que puede ser un buen momento para utilizar los dispositivos que más consumen o caldear nuestros hogares para el resto del día.
“Estos son solo algunos consejos para evitar que nuestras facturas aumenten en los meses en los que el frío apremia y necesitamos que nuestros hogares se mantengan a una temperatura adecuada” afirma José Antonio Afonso, Segment Manager de Eaton Iberia. “Además, como solución alternativa, en Eaton siempre apostamos, recomendamos y confiamos en los SAIs o los llamados sistemas de alimentación ininterrumpida, que hacen que nuestros dispositivos se mantengan conectados y seguros en temporadas en las que el consumo eléctrico es considerablemente mayor, como puede ser el invierno. Estos sistemas garantizan la continuidad de los aparatos conectados a la red y evitan que, en caso de apagón, dejen de funcionar de manera repentina”.
|